Color my life with the chaos of trouble.


10 sept 2013

El verano en Buenos Aires

Los perros echados en la vereda, el olor a supermercado Chino, las chicharras, los golpes del chancleteo de las hawaianas contra la vereda, la frase 'La revolución es del corazón' escrita con aerosol en la pared de la esquina, las rejas con medias-sombras agujereadas y mal puestas, el vecino gordo y pelado manguereando la vereda y las naranjas del frutero de la esquina que me tiran azahares dice el tango.
Llegó.

4 sept 2013

T.A.L.P


Ella se ríe fuerte y con ganas, despreocupada, con los ojos casi cerrados por la fuerza que sus pómulos ejercen hacia arriba, impulsados a su vez por la fuerza que también ejercen hacia arriba las comisuras de su boca. Sus dientes se notan, todos. No lo puede evitar y no le importa. No está pensando en si tendrá algún orégano de la pizza de hace un rato entrometido en algún rincón, o si se dan cuenta de que sus dos paletas son más grandes que el resto de los dientes. Simplemente su risa explota y se expande por toda la terraza, como un fuego artificial de mil colores distintos.

Él se ríe, porque la hizo reír, y las chispitas del fuego artificial le encendieron todas las cañitas voladoras de su risa, un poquito menos explosiva que la de ella, pero no por eso menos auténtica.


Los dos van girando según ven que giran los demás, y según cambia el ritmo de la música. No tienen mucha idea de cómo es el asunto, pero cada vez que se encuentran en el giro del medio, se miran como si se estuvieran por decir algo, y cuando se separan, vuelve a explotar la risa. Se miran, también, sabiendo ambos que están siendo ridículos y que no les importa. *



ffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffff you.